El proceso para efectuar un recubrimiento de HALAR® consta de tres partes bien diferenciadas:
Hay que eliminar cualquier resto orgánico o inorgánico que pueda afectar a la adherencia del recubrimiento al sustrato. Para ello hay que desengrasar las piezas a tratar. Se puede desengrasar bajo medio alcalino ó ácido, con disolventes o mediante pirolisis controlada. El método a utilizar dependerá del tipo de pieza, las cantidades y la naturaleza de la contaminación.
Después del desengrase hay que preparar la superficie a recubrir para garantizar la adherencia del film. Esto se consigue mediante un chorreado con óxido de aluminio (corindón). El arenado genera en la superficie a tratar una rugosidad determinada que constituye la base optima para una adherencia mecánica y una adherencia química.
Antes de empezar a recubrir, hay que precalentar la pieza en un horno a unos 300ºC. Una vez caliente la pieza ya se puede empezar a recubrir la pieza. Primero se aplica una imprimación (de color verde o negra), se vuelve a hornear hasta que licue. Una vez se ha fundido la imprimación, se saca del horno y se aplica la capa final (translúcida) de HALAR, se vuelve a introducir la pieza en el horno. Vamos repitiendo este último procedimiento hasta alcanzar el espesor deseado. Durante todo el proceso, la pieza debe estar a más de 250ºC. Las temperaturas y tiempos dependen de la masa de la pieza.
Si desean más detalles rogamos contacten con nuestro departamento técnico.